El comienzo de esta sección no podía ser de otra manera ya que hablar de Simon Lessing es hablar de palabras mayores. Cuando hablamos de las leyendas del triatlón, hay una que sobre sale por encima del resto ya que nadie ha conseguido proclamarse campeón del mundo más veces que él.
En la década de los 90 el triatlón mundial tuvo un claro dominador, el británico Simon Lessing, ganador de cuatro oros mundiales. Entre 1991 y 1998 tan solo faltó a su cita con el podio en el año 94, cita en la que no pudo competir y el título de mejor triatleta del mundo fue a parar a su compatriota Spencer Smith. Además de los cuatro títulos mundiales, Simon Lessing consiguió dos platas y un bronce en Campeonatos del Mundo y tres oros continentales.
Su dominio fue más allá de la distancia olímpica y también consiguió proclamarse campeón del mundo de larga distancia. Éxito que logró en 1995, año en el que también se coronó como el mejor triatleta en distancia olímpica.
Nuestro primer primer protagonista de esta sección nació el 12 de febrero de 1971 en Sudáfrica, concretamente en Ciudad del Cabo. A los 19 años se mudó a Gran Bretaña, de donde era originaria su madre, y comenzó a competir con los colores británicos. Históricamente Gran Bretaña ha aportado al triatlón grandes figuras que han dominado este deporte en sus años de existencia y quizás, la que más sobresale es la de este hombre, que junto a Spencer Smith y Alistair Brownlee marcaron su nombre con letras doradas en el mundo de este deporte.
Lessing consiguió su primer título europeo a los 20 años tras cruzar la meta de Genf por delante del holandés Rob Barel, una institución del triatlón europeo. En aquella prueba, tan solo diez triatletas lucharon por el dominio continental, prueba de que el deporte aún no se había consolidado totalmente en el viejo continente.
Un año más tarde, Simon Lessing inauguró en Huntsville su colección de oros mundiales al imponerse en la prueba al alemán Rainer Mueller-Hoerner y al holandés Rob Barel. A este triunfo le seguirían tres más, en el 95, 96 y 98.
Además de estos oros consiguió subirse al podio en tres ocasiones más. Dos de ellas consiguiendo la plata (1993, 1999) y una el bronce (1997).
En el viejo continente se proclamó campeón tres veces (1991, 1993, 1994).
A día de hoy nadie ha conseguido igualar el palmarés de Simon Lessing, pues el único que se ha acercado a la cifra de cuatro títulos mundiales fue el australiano Peter Robertson, que consiguió tres oros entre el 2001 y el 2005.
También mostró su dominio en el triatlón en las pruebas de la Copa del Mundo, ya que consiguió ganar a lo largo de su carrera seis. Comparado con otros triatletas esta cifra puede resultar baja pero no lo es si tenemos en cuenta que, al contrario de otros, también preparaba pruebas de larga distancia.
El mayor fracaso del triatleta británico llegó en la cita más importante para cualquier deportista. En el año 2000, la ciudad australiana de Sidney daba la bienvenida a un deporte que se iba a asentar con el paso de los años en el calendario olímpico. Simon Lessing llegaba al debut olímpico de su deporte como el mejor triatleta de todos los tiempos y como el máximo favorito a llevarse la medalla de oro, un premio que probablemente jamás podría conseguir si no lo hacia en Sidney. Pero el destino quiso que Simon, al igual que otros grandes atletas, se quedara sin el premio olímpico, premio que le coronaría sin duda como el deportista más completo del mundo.
En aquellos Juegos Olímpicos, a los que Simon Lessing llegó con 29 años, no pudo ser más que noveno en una prueba dominada por, el que hasta el día de hoy es el triatleta más laureado en los Juegos, el canadiense Simon Whitfield.
La prueba comenzó muy bien para el triatleta nacido en Sudáfrica, ya que salió del agua en segunda posición tras el australiano Craig Walton, pero en la carrera a pie corrió un minuto más lento que el canadiense, tiempo que le privó de cumplir con el pronóstico que le situaba con una medalla olímpica al cuello.
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